Acantilado

"En las obras de Juan López Salvador se produce una muy sugerente simbiosis entre un proyecto espacial abstracto y una sensibilidad excepcional para evocar, casi como si de lo que se tratara fuera de una maqueta, ciertos desolados parajes insulares: acantilados, riscos, desiertos, montañas. La naturaleza es su referente sensorial y su metáfora de ser, la esencia de las cosas.”   

 [Juan Manuel Bonet]   

"Esta reducción fenomenológica del paisaje de la isla encuentra en la obra escultórica de Juan López salvador su realización más esencial. La energía de la isla es implosiva la luz es absorbida por las oscuras masas lígneas; los acantilados se desploman sobre sí mismos..."   

[Fernando Castro]   

"Al hacer que la fragmentación transforme la superficie hasta lo ilimitado; al hacer que el desplazamiento y el emplazamiento se multiplique hasta lo indefinido, Juan López Salvador abre un campo de inmanencias que se articula como un desmontaje, un pronóstico, un diagnóstico, arrastrando sus contenidos.”   

[Antonio Zaya]   

"La objetivación de su experiencia del paisaje, de sus formas y las sensaciones (vértigos, equilibrios, distorsiones) no acota el discurso. Sus últimas esculturas son astutas,  trampas de viento, de agua o de pensamiento vitalizadas con  humor férreo. Pliegues y ritmos ortogonales, gestualidad y rigor geométrico, vacío y tensiones. Herramientas inútiles y poéticas, manufacturadas con probidad, oficio y amor".

 [Carlos Díaz-Bertrana]

"Desemboca todo ello en una obra de mayor creatividad, que no permanece en el puro deleite de las formas, volúmenes y tonalidades; sino que paisajes, acantilados, formaciones rocosas y cubos, comparten el protagonismo de una profunda reflexión sobre la lenta agonía del ser en un espacio que lo encierra”.     

[Gopi  Sadarangani]