10 nov 2011
TEA proyecta 'Las razones del corazón'
TEA proyecta desde el viernes 11 y hasta el domingo 13 'Las razones del corazón', el último trabajo realizado hasta la fecha por el director mexicano Arturo Ripstein. Este filme en blanco y negro, que se estrenó este año en la Sección Oficial del Festival de San Sebastián, se podrá ver en versión original en español en dos pases diarios, que comenzarán a las 19,00 y a las 21,30 horas. Se trata de una adaptación libre de la obra Madame Bovary, de Gustave Flaubert.
Arcelia Ramírez, Vladimir Cruz, Plutarco Haza, Patricia Reyes Spíndola, Pilar Padilla, Alejandro Suárez y Paola Arroyo encabezan el reparto de Las razones del corazón (2011), un drama que se centra en la historia de Emilia, ama de casa agobiada por la medianía de su vida, por su marido fracasado, y por su maternidad mal llevada, que siente que se le derrama el vaso de la vida. Para colmo en un mismo día la abandona su desdeñoso amante y le embargan la tarjeta de crédito. En su apartamento, vacío y desolado, decide tomar por fin una decisión largamente meditada: el suicidio. Curiosamente su muerte provoca el acercamiento entre el marido cornudo y el amante esquivo.
Arturo Ripstein (México, 1943) comenzó desde muy joven su carrera en el cine como actor y ayudante de dirección en varias películas. Su padre, el productor Alfredo Ripstein, lo familiarizó desde pequeño con la cinematografía mexicana y a los quince años presenció el rodaje de Nazarín (1958) y descubrió a Luis Buñuel, con quien desarrolló una estrecha relación maestro-alumno. En 1962 trabajó de ayudante de dirección con él en El ángel exterminador y a los 21 años dirige su primera película Tiempo de morir, a partir de un guión de Gabriel García Márquez y Carlos Fuentes.
Durante los años setenta, Ripstein se consolidó como director e inició una de las etapas más fructíferas de su carrera, la cual incluye tres de las cintas más importantes del cine mexicano contemporáneo como El castillo de la pureza (1972), El lugar sin límites (1977) y Cadena perpetua (1978). La soledad de las almas y la imposibilidad de cambiar la propia naturaleza son temas recurrentes en la filmografía de Ripstein. Variaciones sobre estos temas se localizan en todas sus películas, particularmente en Principio y fin (1993), La reina de la noche (1994) y Profundo carmesí (1996).
El plano-secuencia es su herramienta fundamental para la puesta en escena. Estas características han hecho de Ripstein un director controvertido: amado y odiado por partes iguales, pero nunca ignorado. Su carrera se ha convertido en una de las más significativas e importantes del cine mexicano y mundial de las últimas décadas, lo que le ha proporcionado múltiples premios tanto a nivel nacional como internacional, entre ellos la Concha de Oro del Festival de San Sebastián a la Mejor Película en 1993 por Principio y fin y en 2000 por La perdición de los hombres.