24 nov 2017
TEA Tenerife Espacio de las Artes presenta 'La ciudad sumergida', la primera exposición en España dedicada a Aube Elléouët-Breton
TEA Tenerife Espacio de las Artes, centro de arte contemporáneo del Cabildo, presentó hoy [viernes 24] 'La ciudad sumergida, la primera exposición en España dedicada a la artista Aube Elléouët-Breton (París, 1935). La muestra, la primera retrospectiva que le dedica un museo, exhibe más de medio centenar de collages y fotomontajes de la creadora francesa, realizados entre 1970 y 2017. El director insular de Cultura y Educación, José Luis Rivero; el comisario de la muestra y conservador de la Colección de TEA, Isidro Hernández; el marchante y propietario de la Galería 1900-2000, Marcel Fleiss, y la propia artista Aube Elléouët-Breton, fueron los encargados de dar a conocer este nuevo proyecto expositivo, que inaugurará hoy a las 20:30 horas el presidente del Cabildo, Carlos Alonso.
Cuando han pasado 82 años de la visita que los surrealistas realizaron a la Isla con motivo de la Segunda Exposición Surrealista, unacontecimiento cultural de magnitud mundial y que -según recordó José Luis Rivero- fue uno de los hitos culturales que modificó la historiografía del arte en Tenerife, TEA retoma ese contacto con el surrealismo. Y lo hace a través del arte de Aube Elléouët-Breton, hija del escritor e ideólogo del Surrealismo André Breton y de la pintora Jacqueline Lamba, quien precisamente estaba embarazada de ella en aquella visita.
"Es un momento muy especial para nosotros", declaró Rivero quien explicó que esta muestra "pone en valor el trabajo de esta artista", cuyas obras poseen una gran agudeza poética. En su intervención, el responsable de Cultura del Cabildo explicó que las creaciones de Aube Elléouët-Breton dialogan en esta exposición con distintas obras de óscar Domínguez, pertenecientes a la Colección de TEA. Esta muestra podrá visitarse en TEA Tenerife Espacio de las Artes hasta el 13 de mayo de 2018, de martes a domingo de 10:00 a 20:00 horas.
La ciudad sumergida -agregó José Luis Rivero- viajará posteriormente al Museo Casa Estudio Diego Rivera y Frida Kahlo, centro dependiente de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, lugar en el que la propia artista vivió un año junto a su madre cuando ésta contaba con tan solo nueve años. "En México las obras de Aube Elléouët-Breton establecerán un nuevo diálogo con las de Diego Rivera y Frida Kahlo", adelantó.
"Estoy realmente emocionada. Tenerife es una isla mágica", confesó la artista que no dudó en afirmar que ésta es una "exposición magnífica" y que en ella ha descubierto sus propios collages. "Este lugar, que es estupendo, hace que ahora vea estas obras de una manera diferente. Es casi como si las viera por primera vez", apuntó la creadora francesa quien recordó como sus padres le hablaban de aquella visita a la Isla que realizaron en el año 35.
Isidro Hernández, comisario de La ciudad sumergida, reconoció que desde el año 2006 (cuando el Cabildo adquirió un primer collage de Aube Elléouët) siempre había querido hacer una exposición con sus trabajos. Por lo que afirmó que la inauguración de esta muestra sea para él y para su equipo "un momento de gran ilusión, de gran satisfacción". Durante su intervención habló de como en la década de los 70 la artista, "con esa capacidad visionaria" que tiene, empezó a realizar estas primeras obras en la intimidad del hogar y que luego han sido expuestas en numerosos países.
Su collages, sus fotomontajes -agregó- muestran un "mundo fascinante donde la imaginación es plena". En ellos se aprecian además algunos vasos comunicantes con las obras de óscar Domínguez como son las apariciones del mundo cósmico o natural, unas conexiones que se pueden ver en ese "diálogo poético y muy discreto" que la exposición ha establecido entre los dos creadores.
La muestra cuenta con la colaboración varias colecciones particulares así como de las galerías parisinas Galerie 1900-2000 y Galerie Thessa Herold. Precisamente Marcel Fleiss, de Galerie 1900-2000, destacó que los collages de Aube Elléouët-Breton "son realmente originales y son el resultado de un trabajo hecho con calma, con mucha atención, mucha delicadeza y mucha poesía".
La ciudad sumergida incluye además una selección de dibujos colectivos que realizaron en la ciudad de Marsella en 1941 los surrealistas Victor Brauner, Jacques Hérold, Wifredo Lam, André Breton, Jacqueline Lamba y óscar Domínguez. La exposición se completa con un autorretrato de Jacqueline Lamba del año 1927, con una serie de fotografias de carácter documental sobre Aube Elléouët-Breton así como con un ejemplar de la entrega número 35 de Gaceta de Arte y con varias publicaciones y catálogos de la artista francesa.
El título de esta exposición alude a una vieja leyenda celta de origen bretón, que habla de una ciudad que desapareció tragada por las aguas de la costa atlántica francesa. Se trata de la ciudad de Ys, que según el mito, fue la más bella que jamás existió hasta que vio cumplido su destino y se vio anegada, desapareciendo bajo el mar. El rey Gradlon, durante años de batallas acumuló innumerables riquezas. Su hija, Dalhut, creció y adquirió fama y belleza pero también cultivó un carácter caprichoso e intemperado. Un día pidió a su padre que le construyera una ciudad: esa fue Ys (en la costa de Bretaña).
Una ciudad de piedra cerrada por altos muros que el mar rodeaba. Durante el día se abrían las puertas de la ciudad y el mar permanecía en calma. Pero durante la noche las mareas alcanzaban las almenas de las altas murallas. Se dice que la princesa organizaba en ella fiestas cada noche. Una noche le robó las llaves a su padre y olvidó cerrar la puerta. El mar se enfureció y enterró la ciudad bajo el fondo del mar. El rey y su hija trataron de escapar a lomos de su corcel pero la joven cayó del caballo y se convirtió en espuma de mar, en el mismo lugar en el que estaba la ciudad.
Aube Elléoüet-Breton empezó a realizar sus collages en 1970 y desde entonces sus creaciones- que ella misma define como "collages romantísticos"- se han podido ver en numerosos países, tanto en exposiciones individuales como en colectivas. Entre sus muestras individuales se encuentran las celebradas en la Galerie Le Triskèle (París, 1977), Bar la Licorne (Brest, 1980), Galerie du Cerf-Volant (Bordeaux, 1988), Société Européenne d'Art Villeneuve (Loubet, 1991), Galerie Vivant (Tokyo, 1992), Galerie Alain Gueguen (Azay-le-Rideau, 1993), Maison des poètes (Saint-Malo, 1997), Galerie 1900-2000 (París, 2006), Laleh June Galerie (Basel, 2015) y Galerie 1900-2000, París, 2016).
El comisario de la muestra, Isidro Hernández, destaca que "ser collagiste a la manera en la que lo es Aube Elléouët implica cierta inclinación hacia el impulso de juego y a la extrañeza de crear imágenes inusitadas, maravillosas o, como diría la propia autora, romantistiques, siempre sorpresivas y de gran agudeza poética". Los escenarios que proponen sus creaciones obvian lo previsible y mantienen la expectativa de imágenes en combinaciones inesperadas, surgidas de una imaginación totalmente libre. En ellos, el orden normal del mundo cotidiano tal y como lo conocemos se resquebraja y saltan por los aires todos los convencionalismos para acceder a la invención de una realidad insospechada, imbuida del poder creador de la metáfora y del lenguaje alegórico.
Es frecuente encontrar en sus trabajos incorporaciones de materiales y recortes fotográficos próximos a los escenarios de su vida en la región de Bretaña, territorio del oeste francés al que le une una intensa relación tanto como escenario de reclusión y reflexión creadora, como lugar de trabajo y, en fin, como espacio propicio para establecer una relación directa con la naturaleza. De ahí -continúa Hernández- su preferencia por motivos marinos tales como los faros -elemento icónico en sus collages-, los instrumentos de navegación, las conchas, los arrecifes y las rocas, sobre los que reposa el sueño de sus personajes, entre otras alusiones a aquel lugar de tan rica tradición oral de narraciones y leyendas.
La combinación de esos y otros elementos constituye una aparición mágica sobre los fondos generalmente oscuros del papel, y confieren al conjunto de sus collages un entorno de brillos e incandescencias, Los collages de Aube Elléouët se muestran como vestigios y maravillas de la ciudad de Ys, construida por Gradlon, rey de Cornualles, a petición de su hija Dahut, y posteriormente engullida por el océano.
L'escalier (1998), Biographie d'un brocanteur (2005), Le timbre (2016), Les 9 cerveaux (2016), Les abysses (2005), Les argonautes II (2006), Les draps (1994), Les galets d'or (2005), Les metiersoublies II (2004), Les temoins de Derain (2016), Les troisstations (2003), Mes animaux familiers (2013), Sous l'ecorce (2000), Souvenir de Derain (2012), L'acrobate (2012), L'arbre de Frida (2017), L'ecrivainpublic (2006), La cavale de rochers (2011), La fenêtre rouge (2006), La malle poste (2013), La rencontré de Queequeg et de la princesse de Cleves (2011), Le fond du puit (2000), Le pari de malkine (2004) o Le prophete (2006) son algunas de las obras de Aube Elléouët que se pueden ver en esta muestra. De óscar Domínguez se exhiben La bola roja (1933), Los caracoles (1940), Aparición sobre el mar (1939), El cometa (1940), Árbol (1937) y Los platillos volantes (1939).