Dulces sueños

Mixto

20 sep 2024 > 01 dic 2024

Dulces sueños

De Carlos Rivero

Carlos Rivero

Dulces sueños, de Carlos Rivero, es una exposición que forma parte del ciclo Filtraciones y que puede visitarse en este espacio hasta el 1 de diciembre. Esta muestra reúne una selección de sus últimos dibujos, esculturas y acuarelas, todos ellos marcados por el signo experimental y totalmente imprevisto del color y del trazo. Su obra obedece a una inquietante y turbadora iconografía de escenas y personajes surrealizantes, convocados sobre el lienzo o el papel desde de un mundo obsesivo, mágico, tenebroso y oscuro. 

Durante el período de apertura de la exposición el artista ofrecerá varios talleres de acuarela experimental.

La primera sesión tendrá lugar el 18 de octubre, de 17:00 a 20:00 horas, y el 19 de octubre, de 10:00 a 14:00 horas. Mientras que la segunda sesión se celebrará el 15 de noviembre, de 17:00 a 20:00 horas, y el 16 de noviembre, de 10:00 a 14:00 horas.

Para asistir a estos talleres, que son gratuitos, es necesario inscribirse previamente enviando un correo a tea@tenerife.es

Equipo curatorial de la muestra: Isidro Hernández, Mateo Maté y Ramón Mateos

A propósito del pintor Carlos Rivero

Tras su paso por el espacio independiente de arte contemporáneo Nadie Nunca Nada No, y por la sala de arte TEA del municipio de Candelaria, el pintor Carlos Rivero presenta en el Ciclo Filtraciones de TEA Tenerife Espacio de las Artes una muestra de sus trabajos en acuarela y dibujos más recientes. El suyo es un uso experimental y totalmente libro del color y del trazo, de modo que el conjunto de sus trabajos está marcado por el signo de lo imprevisto y de la espontaneidad.

Carlos Rivero (Tenerife, 1964) estudió BBAA en la facultad de La Laguna y terminó sus estudios en la Universidad Complutense de Madrid por la especialidad de grabado. En aquella ciudad expuesto de forma individual en varias galerías y salas de arte, entre ellas, la Galería Estampa y Tercer Espacio, y participó en otras muestras de carácter colectivo. Actualmente reside en Canarias. En el CAAM de Las Palmas de Gran Canaria colgaron varias telas suyas en el contexto de la colectiva 7.1 Distorsiones, documentos, naderías y relatos (2007), y en On paiting (2013), y en 2010 presentó el proyecto Ciénaga en las Salas de Arte Arte Contemporáneo SAC del Gobierno de Canarias, 2010.

También ha expuesto varias pinturas en colectivas celebradas en Tea Tenerife Espacio de las Artes; como en el proyecto Se rompió el cántaro (2010), en Zoología fantástica (2012) y en la muestra colectiva El fin del mundo como obra de arte, que pudo visitarse en TEA en 2016 y posteriormente viajó al Centro de Arte La Ragenta de Las palmas de Gran Canaria. Otros proyectos suyos de carácter individual son Joyas Bárbaras (Círculo de BBAA); Cinismo o supervivencia (Ateneo de La laguna); Doble su memoria (Galería Artizar); Las vírgenes locas, celebrada en el espacio de arte Bronzo de La Laguna. También, el proyecto Muerte y resurrección, abierto al público en la sala de arte Bibli, de Santa Cruz de Tenerife. Asimismo, resulta muy destacable su labor como editor de libros de artistas. Bajo el sello Carne, el pintor ha editado una decena de entregas de libros de artistas, prueba de su incansable experimentación en el terreno de la pintura y del dibujo. Asimismo, Carlos Rivero ha desarrollado, desde hace varios años, trabajos de vídeo-creación, estableciendo vasos comunicantes entre las obsesiones y los seres que habitan su pintura y estas nuevas creaciones ideadas para la pantalla y las imágenes en movimiento.

Al visitar el estudio del artista Carlos Rivero o al acudir a sus últimas exposiciones caemos en la cuenta de hasta qué punto su pintura permanece siempre más allá de toda experiencia previsible, pues el caudal del que se nutren sus imágenes mana desde la tierra primitiva de un mundo obsesivo, mágico, tenebroso y oscuro. El pintor es un visionario capaz de traer hasta nuestra mirada imágenes sólo entrevistas en los sueños más imprevistos y angustiosos, o en las páginas de un libro de Gérard de Nerval. La pintura de Carlos Rivero no pretende gustar a nadie; huye de la complacencia como aquél que teme la peste. Sus colores, malolientes, terrosos, macilentos, nacidos del vómito de la conciencia, muestran ante nuestros ojos la náusea y la podredumbre de los cuerpos. Pero también insinúan, con su llama doliente, nacida desde el fondo, las luces incandescentes de lo sagrado. [Isidro Hernández]

DULCES SUEÑOS

Estos trabajos de Carlos Rivero muestran el eterno esfuerzo por reconciliar nuestro ego entre nuestros deseos y la realidad social, entre lo delicado y lo violento, entre el trabajo cuidadoso y el azaroso. Son una mezcla entre ternura y sadismo, surgidas de forma libre.

¿Cómo mostrar en el dibujo de un cuerpo la ambivalencia entre masculino y femenino? ¿Entre lo que es concavidad y lo que es penetrante? ¿Entre lo vertical y lo horizontal como fuerzas perpendiculares que no llegan a tocarse? En estas imágenes Carlos Rivero nos muestra el diario íntimo de un ego no resuelto y el papel se convierte en un campo de batalla en el que su sombra se muestra de la forma más libre posible.

Sin los elementos líquidos no sería posible la existencia. En el sexo, el poder y los fluidos forman una argamasa química y psicológica; se relacionan de manera compleja y natural. ¿Cómo relacionar el agua de una acuarela y el olor a semen que transita por la idea que la ha provocado? Penes, vísceras, vaginas, culos, hongos, fermentación, fecundación, penetración, contaminación y contagio, surgen cuando los charcos y los fluidos se mezclan libremente en las sombras. [Mateo Maté]