Peter Piller construye sus colecciones fotográficas seleccionando desde imágenes impresas hasta las provenientes de los medios digitales. Su atención se centra en su más inmediata proximidad y, durante años, ha estado comprometido con una colección de conductas ajenas a lo habitual pero siempre apegado a lo familiar y lo trivial. De esta manera, ha creado su propio “Archivo” que contiene miles de fotografías. Según Piller, “En un principio buscaba la no-imagen, la imagen sin función o intención. Descubrí fotografías en periódicos regionales que me parecieron asombrosamente cercanas a lo que estaba buscando. (...) Durante estos años, encontré unos cien grupos y categorías en una increíble similitud suprarregional.” Su interés no es la dimensión estética de la fotografía sino la imagen no profesional y estereotipada que a menudo encuentra en el material reunido.