Cursó estudios artísticos en la Academia de Bellas Artes de San Fernando en Madrid (1877 – 1879). A su vuelta a Tenerife estableció una academia de dibujo y participaba en las Exposiciones de Bellas Artes que se celebraban en la isla, dando a conocer su producción pictórica. Colaboró en distintas Sociedades y comités de promoción del Puerto de la Cruz y ejerció durante varios años como concejal y alcalde de la ciudad.

Llegó a la fotografía por necesidad, convirtiéndose en fotógrafo hacia 1885. En 1890 anunciaba su primer taller de fotografía en la Calle Cabeza, 32. En 1896 se trasladó a la Calle de la Hoya, 10 y en 1897 inauguró otro taller en La Orotava, en la Calle del Balcón, 11, regresando a finales de ese mismo año al Puerto de la Cruz. En 1912 llegó a disponer de dos talleres: el de la Calle de la Hoya y otro en la Calle San Juan, 8.

Su producción fotográfica principalmente se divide en retratos de estudio y vistas del paisaje insular, destacando las vistas de Santa Cruz, La Laguna, La Orotava, Los Realejos, Icod de los Vinos, San Juan de la Rambla, Vilaflor, Las Cañadas, El Teide y especialmente las del Puerto de la Cruz. Con sus fotografías de paisaje elaboró un extenso catálogo de vistas la isla, con las que confeccionó importantes colecciones de postales que sirvieron para divulgar masivamente los paisajes del Valle y de la isla.

Bibliografía:

La Isla Mirada. Tenerife y la Fotografía (1839-1939). Tomo I. Los Fotógrafos en el estudio. Carmelo Vega. Centro de Fotografía Isla de Tenerife, Organismo Autónomo de Museos y Centros, Cabildo Insular de Tenerife, 1995