El escultor, orfebre, dibujante y fotógrafo Sergi Aguilar (Barcelona, 1946) estudió en la Escuela Massana y en el Conservatorio de las Artes del Libro de Barcelona entre 1962 y 1967. Durante los siguientes cuatro años siguió formándose y ampliando sus intereses creativos con varias estancias en ciudades como París, Londres, Praga y Stuttgart. En la década de los setenta comienza su andadura en el mundo escultórico, creando sus primeros volúmenes abstractos a partir de una atenta observación de las estructuras geométricas de la Naturaleza. A partir de este punto, más tarde, entre 1973 y 1980, realiza una serie de bloques de mármol de influencia posminimalista, que buscan establecer una relación espacial entre objetos y figuras. En esa tarea de experimentación desarrollada a partir de 1980 emplea distintas técnicas como el collage, el ensamblaje, en los que utiliza fundamentalmente madera, acero o aluminio.  Una década después trabajó con dibujos, fotografías o mapas que ayudan a transmitir de una manera más clara su concepción de espacio y el paisaje. Más adelante abandona la escultura, que entendemos como un ente sólido e independiente, para que el territorio y la noción de desplazamiento se conviertan en el tema y eje principal de su trabajo.

Entre sus exposiciones individuales se encuentra el Instituto Británico de Barcelona (1969); la Galería Joan Prats en Barcelona (1982); el Museo Español de Arte Contemporáneo de Madrid (1984) o Paul Gallery en Tokio (1991) entre otras. Sus exposiciones colectivas se han celebrado en espacios como Solomon R. Guggenheim Museum de Nueva York, Galería Theo de Madrid, Galería Fernando Vijande de Madrid o la Fundación Joan Miró de Barcelona.

El escultor barcelonés también se ha involucrado en el mundo de la docencia, al igual que ha impartido conferencias, cursos y seminarios. Y actualmente, es director de la Fundación Suñol de Barcelona.