06 jun >24 jul 11. TEA Tenerife Espacio de las Artes acoge en Área 60 -el espacio destinado a fomentar y a promocionar la creación artística actual y que aspira a ser plataforma de jóvenes creadores- la exposición 'Corpografías. Seiscientos tres metros', de Raquel Ponce (Las Palmas de Gran Canaria, 1972). Se trata de la segunda muestra de las seis que se presentarán en este espacio expositivo bajo el comisariado de Ángeles Alemán y que girarán sobre el cuerpo y sobre las huellas que la vida, el tiempo o la historia dejan en él.
Raquel Ponce indicó que en Corpografías se pueden sentir algunas de las ideas que son claves en todos sus trabajos como son la memoria, el movimiento de los cuerpos, el tránsito por los espacios o el extrañamiento y resaltó que en esta propuesta el cuerpo deja de ser "objetual, funcional y práctico" para pasar a ser simplemente "un cuerpo-cuerpo que lo único que hace es dejar su huella en un lienzo en blanco, que en este caso son los vídeos". La exposición aparece bañada en las notas de dos composiciones de Bach (temas que han sido mezclados y que suenan hacia atrás con la intención de potenciar aún más esa sensación de extrañamiento), con la idea de descubrir al visitante una realidad matizada o no tan clara como pudiera parecer.
Y es que Raquel Ponce -artista interesada fundamentalmente por el movimiento del cuerpo- materializa en Área 60 estos movimientos corporales, que presenta a modo de huellas y que, en ocasiones, dan origen a dibujos abstractos. Valiéndose de cámaras y vídeos, la artista canaria construye diferentes capas de narración que juegan entre la realidad y la ficción. Ponce reflexiona sobre el mecanismo y sobre el proceso de composición de la obra artística, sobre sus sistemas, sus mecanismos de presentación y sus diferentes niveles de significación. La creadora, que suele trabajar en espacios muy reducidos, crea en ellos sus propias reglas, estableciendo las prohibiciones antes que las instrucciones, trabajando así sobre la propia exploración de las posibilidades implícitas en el propio lenguaje escénico.
Los diferentes dibujos que se hallan en la sala son las pruebas, las "huellas" de su cuerpo, del proceso del vídeo proyectado en este mismo espacio. En ellos, se pueden apreciar los distintos movimientos así como las distintas posiciones de su cuerpo. Mientras que en otra de las paredes, las siluetas que aparecen corresponden a distintas personas cuya impronta fue también recogida por Ponce, a modo de catálogo de huellas y movimientos.
Raquel Ponce es Licenciada en Historia por la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria y se especializó en Historia del Arte. La artista, que se formó, ha trabajado como bailarina, actriz y directora escénica en Canarias y Madrid. Artista residente de los Estudios de Producción del Centro de Arte La Regenta. Miembro activo y Co-fundadora del colectivo artístico independiente El Hueco, fue además co-fundadora de la compañía de nuevas tendencias escénicas Perro verde.
Intérprete de numerosos espectáculos de danza, teatro y performance entre los que destacan los realizados con Gary Stevens (And) y Xavier Le Roy (Extensions o Proyect), presentados en diferentes ciudades europeas (Amsterdam, Lisboa, París, Bruselas, Berlín, Estocolmo o Ginebra), Raquel Ponce como creadora ha realizado e interpretado las piezas escénicas La última vez de siempre, Otra estúpida película norteamericana, Artematón, Cervezas gratis y Narcisa, entre otras.
Ha llevado a cabo proyectos de carácter expositivo que han podido verse en el Gabinete Literario, Laboratorio B9 del Centro Atlántico de Arte Moderno (CAAM), Instituto Cervantes de Berlín, Festival de performance Cuerpo a Cuerpo en el Centro de Arte La Regenta, Festival de Cine de las Palmas de Gran Canaria en la sección La noche digital, Casa de los Coroneles en Fuerteventura, en el Tragaluz Digital de la Sala de Arte Contemporáneo de Santa Cruz de Tenerife, Festival Cinemadamare en Italia o Bienal de Arte de Dakar, entre otros.